La CIA podría operar drones de combate en la frontera con México para espiar a los cárteles
Actualmente, los vehículos aéreos no se encuentran armados, sin embargo, el gobierno de Estados Unidos los ha utilizado durante operaciones en Siria, Irak y Somalia
Un dron MQ-9 Reaper de Aduanas y Protección Fronteriza. (REUTERS/Janis Laizans/File Photo)
En un movimiento que marca un cambio significativo en la estrategia de seguridad nacional de Estados Unidos, la CIA ha estado llevando a cabo misiones encubiertas con drones MQ-9 Reaper sobre territorio mexicano con el objetivo de espiar a los cárteles de la droga, según reportó CNN.
Estas operaciones forman parte de un esfuerzo más amplio de la administración del presidente Donald Trump para redirigir recursos destinados a la lucha contra el terrorismo hacia la frontera sur de EEUU. Este enfoque incluye tratar a los cárteles transnacionales como organizaciones terroristas, aunque dicha designación aún no se ha oficializado.
De acuerdo con el medio, los drones utilizados en estas misiones no están armados en la actualidad, pero tienen la capacidad de ser equipados con armamento para realizar ataques de precisión.
Una operación con antecedentes y una escalada reciente
Un dron MQ-9 Reaper de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, destinado para combatir el terrorismo en la frontera sur (REUTERS/Janis Laizans)
Aunque no es la primera vez que la CIA utiliza drones para rastrear a los cárteles en México, las misiones recientes representan un cambio significativo en la estrategia. Según detalló CNN, en el pasado, estas operaciones se llevaron a cabo bajo programas más pequeños y en colaboración con las autoridades mexicanas. Sin embargo, las misiones actuales fueron notificadas al Congreso de Estados Unidos como parte de un programa encubierto que la CIA pretende mantener en secreto o negar públicamente, lo que indica una escalada en la naturaleza de estas actividades. Además, las notificaciones al Congreso no mencionaron la participación de socios mexicanos, lo que sugiere que estas operaciones podrían estar llevándose a cabo sin la cooperación directa del gobierno de México.
Un portavoz de la CIA evitó comentar específicamente sobre estas misiones, pero afirmó que combatir a los cárteles de la droga en México y en la región es una prioridad para la agencia como parte de los esfuerzos más amplios de la administración Trump para abordar la amenaza del narcotráfico. Según el portavoz, el entonces director de la CIA, John Ratcliffe, estaba comprometido con esta misión.
Implicaciones de designar a los cárteles como grupos terroristas
El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, designa a carteles mexicanos como organizaciones terroristas y problema de seguridad nacional (REUTERS/Kevin Lamarque//File Photo)
La posibilidad de clasificar a los cárteles de la droga como organizaciones terroristas ha generado un debate significativo entre funcionarios y expertos. Según CNN, esta designación podría tener consecuencias importantes, como permitir a Estados Unidos realizar operaciones militares directas contra los cárteles en territorio mexicano. Sin embargo, esta medida también podría complicar las relaciones diplomáticas entre ambos países, especialmente si las operaciones se llevan a cabo sin el consentimiento del gobierno mexicano.
El uso de drones MQ-9 Reaper, conocidos por su capacidad para realizar ataques de precisión, subraya la seriedad con la que la administración Trump abordó la amenaza de los cárteles. Aunque actualmente no están armados, su potencial para ser equipados con armamento plantea preguntas sobre el alcance de las operaciones futuras y las posibles consecuencias de una escalada en el uso de la fuerza.
El cambio de enfoque hacia los cárteles como una amenaza de seguridad nacional refleja una estrategia más agresiva por parte de la administración Trump. Según CNN, esta postura contrasta con enfoques anteriores que priorizaban la cooperación con las autoridades mexicanas en la lucha contra el narcotráfico. La decisión de notificar al Congreso sobre estas misiones como parte de un programa encubierto sugiere que la administración buscaba evitar el escrutinio público y las posibles críticas internacionales.
La falta de mención de socios mexicanos en las notificaciones al Congreso también plantea dudas sobre el nivel de cooperación entre ambos países en estas operaciones. En el pasado, la colaboración entre Estados Unidos y México ha sido fundamental para abordar el problema del narcotráfico, pero estas nuevas misiones podrían indicar un cambio hacia una estrategia más unilateral por parte de Estados Unidos.